Descubre cómo elaborar un buen discurso

Arcana Comunicacion-Elaborar un discurso

Descubre cómo elaborar un buen discurso

Después de sufrir algunas intervenciones de personajes públicos y privados en eventos, cursos y otros acontecimientos, creo imprescindible, dar unos cuantos consejos sobre cómo elaborar un buen discurso.

Vaya por delante que sabemos que, en muchas ocasiones, quienes declaman los discursos no son quienes los escriben y por tanto, siempre puede haber una cierta discrepancia entre discurso escrito y discurso hablado. En estos casos una cosa necesaria es que el discurso se interiorice o que, como se dice en el argot de la comunicación, se haga suyo el discurso. Es decir, se acomode al lenguaje y argumentos que uno mismo usaría.

Pero vayamos mejor a los discursos que cada persona se tenga que escribir para uno mismo.

Para triunfar en un parlamento y quedarse con la audiencia es necesario empatizar con el público que vaya a tener y tratar de ganarse su atención y su confianza en tus palabras.

Para conseguirlo voy a contarles algunos consejos, aunque el primero es que, a pesar de que usted quiera salir sin papeles al dar el discurso, es importante prepararlo por escrito. Escribirlo fija las ideas y nos permite visualizar todo el discurso como algo global. Eso nos ayudará a ver si hay algún fallo o es demasiado largo o corto o si nos dejamos algo por decir.

Es el momento de enfrentarte a la página en blanco…

¿Qué debemos hacer?

 

  1. Marcar el objetivo del discurso. Debemos saber qué queremos conseguir con nuestras palabras. Contar algo, convencer de una idea, hace cambiar de opinión, poner en valor un proyecto o a una persona… en fin, qué queremos decir.
  2. Definir las “ideas fuerza”, es decir, establecer los puntos importantes del discurso. Mi consejo es que no sean demasiados. De hecho, si me piden opinión creo que con 3 ideas fuerza suficiente. Sobre ellas ha de girar todo el discurso.
  3. Estructura. Desde luego hay muchos tipos de estructura en un discurso. Tantos como tipos de actos en los que hay parlamentos públicos. Por eso, hay que valorar quien es el público, donde te encuentras, qué tipo de acto es… y acomodar esa estructura al evento donde debemos hablar.
  4. Adecua el lenguaje al público. Ni por exceso, ni por defecto. No debemos ser demasiado rimbombantes ni demasiado chabacanos. El tipo de lenguaje que utilicemos debe ir acorde a quienes nos han de escuchar. Y, en caso de duda, siempre, ser más serio que jocoso. Si se nos ha pedido hablar en público es porque nuestras opiniones interesan, así que hay que dar valor a quien nos ofrece esa posibilidad.
  5. Una introducción atractiva. Los primeros minutos son fundamentales para captar la atención. Hay que generar expectativa en nuestras palabras desde el principio.
  6. Igual que una conclusión firme. El final ha de ser contundente. Nuestras ideas fuerza, nuestro objetivo del discurso debe quedar bien sentado y el colofón debe generar en el oyente la sensación de haber comprendido todo y, si es posible, haberle contagiado el entusiasmo o las ideas propuestas.
  7. Mide los tiempos. Antes de realizar un discurso hay que saber de cuánto tiempo disponemos. Mi consejo es siempre ser mejor breve que extenso. Como el refrán, lo bueno si breve, dos veces bueno. La audiencia lo agradecerá y seguramente será más fácil haber permeabilizado nuestras ideas.
  8. Es importantísimo ensayar el discurso, la entonación, la declamación, conocer las palabras para no trastabillearse y ganar así en seguridad a la hora de realizar el discurso.
  9. Puesta en escena. La compostura, una imagen firme, un semblante convencido, son el mejor acompañamiento para un discurso. Si usted no cree en sí mismo, no lo van a hacer los demás. Hay que estar seguro con ese discurso que se ha preparado.
  10. El lenguaje no verbal. Mire al público, hable a los ojos de la gente. Levante la cabeza del papel. Hable pausado, que se le entienda. Domine los nervios y siéntase cómodo. Le van a escuchar y eso es un privilegio. Disfrútelo.

Y, aún quedaría una última cuestión: También en un discurso es importante lo que llevamos puesto y cómo lo llevamos puesto. Yo creo que hay que dar valor al hecho de que nos ofrezcan la oportunidad de hablar y nunca desmerecer el privilegio, por tanto, el vestuario ha de estar a la altura de las circunstancias.

En Arcana Comunicación somos expertos en comunicación pública y uno de nuestros servicios es la redacción de discursos y parlamentos, además que también podemos trabajar contigo la oratoria y las técnicas de declamación.